El porvenir que nace como un niño, desnudo
...Cuando andemos de nuevo desnudos
y no tengamos vergüenza
Jesucristo
Desnudo nace el niño, desnudo y sin un céntimo.
El porvenir es un niño desnudo.
Vienen después los años, las leyes, los prejuicios, el alquiler,
los primeros ministros, y todo se complica.
Vienen los que se oponen a que la historia crezca,
las brújulas se inquieten y se apasionen los relojes,
y están los que se sientan en la piedra
("Non raggionam di lor, ma guarda e pasa").
A Moisés lo pusieron en una canasta, en la corriente,
y hubo un niño apodado La Suerte de California.
El porvenir estaba en ellos, desnudo y sin vergüenza.
Raúl González Tuñón, Buenos Aires, 1905- 1974
en El rumbo de las islas perdidas, Libros de Tierra Firme, Buenos Aires,1994
imagen Joe Sorren
No hay comentarios.:
Publicar un comentario