Es un problema, porque cuando comento algo me gusta leerlo y releerlo. Aquí, el texto se vuelve eco rápidamente... y yo que desconfío tanto de mi y de lo que he leído... ¿cómo hago ahora? Algo sobre una plaza y el sentido genuino de querer irrumpir en una de esas soledades imaculadas que sólo se construyen habiendo vivido solo. La idea de soledad, de sed y de plaza. De alguna manera, S., en mi cabeza todo aquello es parte de un mismo campo semántico; créame cuando le digo que lo he sentido muy próximo. Una de esas imágenes que infunden ganas de callar, esperar al otro y luego sonreír, porque uno entiende, aunque entienda que nunca podrá hacerse una idea, y que decirlo sonaría hipócrita. Por suerte hoy puedo escribirlo.
pequeñas sincronías simbolistas: una tirada de monedas,los dados de mallarme, revelando una secreta interconexión entre el azar y la muerte: no alcanza para vivir.
a eso me refería sibila, justamente. quien pudiera hacer sin más su morada en el poema? eso le dije: no alcanza para vivir ni para salvar. aunque usted le robe una porción a la eternidad con las bellas líneas que le dedica.
muy bueno eso de callar que dice Tomás, palabras que convocan un enorme silencio porque te llevan a un lugar de espejos en galería. y también con J.G., no alcanza para vivir, quien pudiera no, hacer su morada en el poema? queda el lazo, un sonido para mañana, mas allá de nosotros, pulsos en la línea, el desvelo de algún ojo, papeles, papeles.
17 comentarios:
Es un problema, porque cuando comento algo me gusta leerlo y releerlo. Aquí, el texto se vuelve eco rápidamente... y yo que desconfío tanto de mi y de lo que he leído... ¿cómo hago ahora? Algo sobre una plaza y el sentido genuino de querer irrumpir en una de esas soledades imaculadas que sólo se construyen habiendo vivido solo. La idea de soledad, de sed y de plaza. De alguna manera, S., en mi cabeza todo aquello es parte de un mismo campo semántico; créame cuando le digo que lo he sentido muy próximo. Una de esas imágenes que infunden ganas de callar, esperar al otro y luego sonreír, porque uno entiende, aunque entienda que nunca podrá hacerse una idea, y que decirlo sonaría hipócrita. Por suerte hoy puedo escribirlo.
escribir es decir, tomás. gracias. sé que usted comprende.
feliz día. sé qué, seguramente, es amigo de alguien.
Suyo, si me permite. Hoy cuando salga, me voy a poner un buzo. No sé, se lo comento, por si le interesa, ¿vio?
sí, amigo. abríguese. podría usted enfermarse.
pequeñas sincronías simbolistas: una tirada de monedas,los dados de mallarme, revelando una secreta interconexión entre el azar y la muerte: no alcanza para vivir.
Ya veo por dónde viene. Veo.
las monedas fueron después de la muerte, j.g. nadie lo salvó.
por la sed. siempre.
a eso me refería sibila, justamente. quien pudiera hacer sin más su morada en el poema? eso le dije: no alcanza para vivir ni para salvar. aunque usted le robe una porción a la eternidad con las bellas líneas que le dedica.
los salmones nadan contra la corriente.
Los dorados también?
no sabía.
muy bueno eso de callar que dice Tomás, palabras que convocan un enorme silencio porque te llevan a
un lugar de espejos en galería.
y también con J.G., no alcanza para vivir, quien pudiera no, hacer su morada en el poema?
queda el lazo, un sonido para mañana, mas allá de nosotros, pulsos en la línea, el desvelo de algún ojo, papeles, papeles.
Lilián
yo tampoco. pero mi amigo linqueño sabe. le creo. sé que está.
vaya. sí, papeles, lilián y silencios.
Sepa amiga que vengo 100% en son de paz. digo por si quedaban dudas.
ninguna duda. vio qué lindo lo que dicen los amigos, a veces.
carito, amiga: puede usted dejar de perseguirse? si no no le paso los datitos que me pidió anoche...je
Sib: No persigo. Me preservo y a Ud. un poquito también.
Vamos por el baile!
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